Casi 30 años después de la tragedia de la central nuclear de Chernóbil, el sarcófago de hormigón y metal que recubre el reactor siniestrado y evita que se filtre más radioactividad necesita protección adicional. ¿Cómo? Con una enorme cúpula metálica que avanza a buen ritmo y que estará completa para 2015.
La cúpula es obra de un equipo de ingenieros ingleses y se gestó en 1992, sólo que han hecho falta años de preparativos antes de poder comenzar las obras. El sarcófago del reactor aún emite demasiada radioactividad como para que los obreros puedan trabajar sobre él con unas mínimas condiciones de seguridad.
Esa es precisamente la singular clave de este proyecto. La cúpula se está construyendo apartada del reactor. Cuando esté completa, unas vías de tren sobre las que se asienta la estructura, de 29.000 toneladas y 90 metros de altura, la moverán hasta su localización definitiva sobre el reactor.
Incluso con esta precaución, todos los trabajadores de esta obra tienen rigurosos turnos y un máximo de horas de exposición a la radioactividad al mes y al año. La peor parte se la lleva el grupo de operarios de élite encargados de las chimeneas. Justo sobre el reactor 4 hay dos chimeneas que hay que desmontar antes de poder mover la cubierta. Los trabajadores de esta zona tienen que extraer secciones de la chimenea mediante cortadores de plasma. Cada turno en este área no puede exceder de unas pocas horas.
Para añadir más tensión al asunto, la secciones cortadas de la chimenea deben ser descolgadas con sumo cuidado mediante una grúa. Si alguna de ellas cae sobre el sarcófago del reactor podría dañarlo, y hasta propiciar una nueva nube radioactiva. Casi treinta años de la catástrofe, Chernóbil sigue siendo uno de los rincones más terroríficos del planeta.
Debajo te mostramos la evolución de la construcción de este nuevo sarcófago durante los últimos meses.
Septiembre 2013
Diciembre 2013
Enero 2014
Febrero 2014
Marzo 2014
Abril 2014
Fotos: AP y CHNPP
Fuente: http://es.gizmodo.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario