La época de coleccionar cromos de jugadores de fútbol ya pasó para muchos de nosotros y es que, aunque el vicio sigue escondido tras la figura del padre comprándole sobres a sus hijos, no tenemos tiempo ni ganas de dejarnos medio sueldo en papel con pegatina para volver a ello.
¿Significa eso que por el hecho de hacernos mayor tenemos que dejar de disfrutar del fútbol si no es frente a un televisor o con unas botas con tacos en los pies? Nada más lejos de la realidad y, precisamente de ahí, nace el éxito de Comunio, el juego sobre ser mánager de fútbol para los que no entienden ni de juegos ni de gestión de clubes.
Cromos de fútbol para adultos
Los que ya han llegado a él lo han hecho por la vía típica, por una liga creada entre los trabajadores de su empresa o por un grupo de amigos, y aunque el primer contacto siempre se hace con ciertas reticencias, al ver que la dedicación que necesita es casi mínima no cuesta nada acabar enganchado.
Poder jugar desde el teléfono o desde el navegador y dedicarle menos tiempo del que pasas viendo las fotos de las vacaciones de tus amigos en Facebook, hace de él una experiencia tan entretenida como poco absorbente, y es que tampoco habrá hueco para más, puesto que su nivel de profundidad no admite mucho más tiempo frente al monitor.
¿Qué es Comunio y cómo se juega?
La idea de este juego de navegador nacido en Alemania durante la temporada 2000/2001 es que nos enfrentemos a la idea de crear nuestro propio equipo ideal. Empezamos con un puñado de millones y un equipo básico que lleva el nombre que nosotros queramos ponerle.
A partir de ahí nuestro objetivo será aprovechar la buena (o mala) forma de los jugadores en el mundo real para ir comprando y vendiendo con el fin de tener un equipo lo más potente posible. Nuestro equipo con delanteros de la zona baja de la clasificación y porteros que son grandes estrellas no juega, claro, así que la puntuación se basa en el rendimiento de esos jugadores durante la última jornada de la LigaBBVA.
Que Alves se lesiona después de haber pagado tres millones de euros por él, pues ya sabes que la inversión no va a ser buena a corto plazo, pero puede que luego comience a despuntar y, entre jugadas, pases de gol y zambombazos que entran por toda la escuadra, los puntos empiecen a llegar.
Cada jugador que guardas en tu alineación suma, así que el hecho de tener que analizar cómo van mejorando o empeorando en cada jornada mientras sumamos la estrategia de comprar o vender a la máquina o a tus compañeros es la gracia principal del juego.
¿Problemas con Comunio? Aquí tienes otras alternativas
Uno de los mayores problemas con Comunio es precisamente su fama, que provoca que los servidores den más problemas de lo habitual en estas plataformas y se haya creado un servicio de pago para acceder a mejores servidores.
Para que no tengáis que sufrir por ello y perder a un crack como Cristiano o Messi por el camino, aquí os dejamos tres alternativas que harán las delicias de los fanáticos de este tipo de juegos.
- La Liga Fantasy: se trata de una aplicación para iOS y Android que sigue el mismo estilo de juego que Comunio, pero en este caso es la LFP la que está detrás de La Liga Fantasy y su valoración de puntos, así que es mucho más justa que los puntos otorgados por un diario deportivo y cuenta con un diseño mucho más cuidado.
- Rivalio: aún no se ha convertido en una de las grandes alternativas por número de usuarios, pero lo tiene todo para acabar estando entre las mejores. Con un diseño minimalista, bien cuidado y apto para realizar las últimas transacciones de la jornada desde el ordenador o desde el móvil, Rivalio es una delicia porque sigue las mismas reglas de Comunio y además ofrece su propio sistema de algoritmos para las puntuaciones.
- Net Liga: si tu relación con los juegos de fútbol se quedó en el PC Fútbol con los partidos comentados por Michael Robinson, aquí vas a encontrar un filón. Net Liga tiene todas las opciones de Comunio, pero además incluye aspectos como cláusulas, gestión de patrocinadores, creación de estadios, añadiendo un nivel de profundidad que nada tiene que envidiar a los simuladores clásicos de PC.
Quién sabe, a lo mejor has nacido para ser ojeador y tienes un don para esto. No te va a solucionar la vida porque aquí no hay apuestas ni nada por el estilo de por medio, pero lo de restregar por la cara a tus compañeros de curro que les estás dejando atrás en la clasificación no tiene precio, así que ya tienes una alegría más asegurada cada semana.
Fuente: www.bluebbva.com
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