Aunque parezca increíble, los primeros ejemplos de tablet se mostraron en la película 2001, odisea del espacio (de 1969), así como en la serie Star Trek (de los años sesenta).
Probablemente inspirado en esos conceptos, Alan Kay, un informático que trabajaba para Xerox, publicó en 1972 su artículo “Un ordenador personal para niños de todas las edades”. En él hablaba del Dynabook, que consistía en una pantalla con un teclado acoplado, más parecido a lo que entendemos ahora por Notebook o un portátil pequeño.
Según Kray, un Dynabook debía permitir la edición y almacenamiento de textos, permitir a su dueño expresarse a través de dibujos, animaciones o componer música; ofrecería al usuario la posibilidad de leer incontables libros y cartas, e incluso, debería ser capaz de reproducir varias horas de archivos de música o audio, y servir como medio de comunicación. ¿No es esto lo que hoy en día conocemos como ordenador portátil o, siendo más específico, como tablet?
Sin embargo, se puede decir que la primera tableta de la historia (con el aspecto y la forma que hoy conocemos) es el Gridpad Pen Computer, creado por Grid Systems en 1989. El dispositivo poseía un procesador de 20 MHz y pesaba alrededor de 2 kg.
Usaba una versión de MSDOS, sistema operativo de texto usado en el mundo de los ordenadores, y podías utilizar un lápiz para escribir y tocar la pantalla. En su interior había un procesador muy parecido al IBM PC, basado en la arquitectura x86.
En 1992 la compañía Compaq lanzó al mercado “Compaq Concerto“, considerado el primer portátil que se convertía en tablet, una idea muy innovadora que sin duda sirvió como punto de partida para las próximas “Tablet PC“.
Tras el éxito del Compaq Concerto, IBM presentó el ThinkPad. Como Microsoft no quería quedarse atrás lanzó al mercado el Windows XP Tablet PC Edition, una versiòn de su plataforma capaz de utilizar dispositivos táctiles, como los stylus.
De esta forma dio paso a los Microsoft Tablet PC, que no fueron tan exitosos en el mercado como se esperaba. A pesar de que contasen con el dispositivo en sí, no acabaron de encajar en el mercado: eran dispositivos muy pesados, no había aplicaciones suficientes para poder utilizar y, en muchas ocasiones, no todo el dispositivo era táctil.
En 2010 se presenta el iPad, que supone una revolución en la industria, por lo menos en lo que se refiere a éxito de ventas.
Lo que marcó un punto de inflexión en este mundo fue su interfaz, diseñada específicamente para utilizar con los dedos, con un entorno totalmente independiente de los PCs. Además, la clave de este dispositivo fue que el iPad se creó principalmente para el entretenimiento del usuario, más que en la producción o procesamiento de contenidos.
Fuente: Los 7 datos que deberías saber de la historia de las tablets
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