Y como el incondicional cuadrúpedo, el teléfono celular requiere de atención y cuidados permanentes para mantenerlo sanos y en buenas condiciones, lo que nos asegurará su amistad y servicios por muchos años. Precisamente de esto trata este artículo, en el cual encontraremos los mejores trucos para exprimir al máximo nuestros teléfonos celulares.
Estos consejos abarcan los cuatro problemas con el celular típicos que suelen ocurrir, y que van desde las baterías que se agotan demasiado rápido, el consumo excesivo de nuestro plan de datos, la falta de espacio de almacenamiento, y la rotura de los cables, sea de los auriculares o del cable de carga.
Baterías que se descargan demasiado rápido
Este es uno de los problemas que más angustian a los usuarios de teléfonos móviles, y en los últimos años se ha convertido prácticamente en una religión. Aún con todos los adelantos técnicos que se consiguieron en las últimas décadas, lo cierto es que la duración de la batería del móvil siempre será insuficiente, por más caro que sea el modelo de smartphone que poseamos.
Algunos de los teléfonos más caros en el mercado ofrecen una duración de la batería más larga que modelos menos costosos, sin embargo llegado un punto, todas necesitarán ser recargadas, y lo más probable que sea en el momento justo en el que necesitamos usar el dispositivo con urgencia.
Afortunadamente, el saber popular ha encontrado algunas soluciones simples de implementar, y que nos pueden ayudar a que la batería de nuestro teléfono dure más tiempo del estipulado de fábrica.
Uno de los trucos para ahorrar batería más populares, se encuentra el que dictamina regular el brillo de la pantalla. Una pantalla que brilla menos, gastará menos batería. Para conseguir esto, tenemos que acceder a la configuración del teléfono y luego a los ajustes de brillo de la pantalla. Esto por supuesto que variará de acuerdo a la marca y modelo del smartphone, así como de la versión del sistema operativo que posea.
Otro aspecto que también sería interesante comprobar si tenemos activada alguna función de brillo automático, y en caso afirmativo desactivarla, ya que a veces suele estar optimizado para ofrecer un brillo más intenso de acuerdo a determinado escenario, el cual no siempre es adecuado a nuestras necesidades.
También deberíamos comprobar que las notificaciones de mensajes y llamadas, así como las demás notificaciones del sistema no estén configuradas para que además de sonar, también vibren. Asimismo, una buena alternativa para ahorrar batería es impedir que las aplicaciones sigan funcionando en segundo plano, además de desconectar sensores que no estamos usando en ese momento, como GPS, Wi-Fi o Bluetooth, ya que al estar constantemente buscando redes o dispositivos consumen mucha batería.
Excesivo consumo del plan de datos
Como todos sabemos, un teléfono celular inteligente, puede llegar a convertirse en un verdadero gastadero de dinero si no tomamos alguna precaución para evitarlo. Para conseguir que nuestro plan de datos dure un poco más de tiempo, por lo menos hasta llegar a fin de mes, podemos implementar una serie de trucos interesantes.
Uno de los primeros, y quizás el más útil de todos es evitar que el sistema realice descargas automáticas. En este sentido, las fotos y vídeos que se descargan desde las redes sociales como Facebook o las aplicaciones de mensajería como WhatsApp a nuestro smartphone son la principal causa del excesivo consumo de datos, y también del consumo de batería.
Si queremos evitar que esto suceda, tenemos que desactivar la descarga automática de imágenes y videos en todas las aplicaciones que utilizamos,además de desactivar todas las notificaciones innecesarias. También sirve activar la casilla de verificación “Reducir el uso de los datos” en Chrome, en el caso de un teléfono con Android, o en Safari, en el caso de un iPhone.
Básicamente, el mejor truco que podemos implementar para ahorrar consumo de datos es evitar que las aplicaciones trabajen en el modo datos, sólo que lo hagan cuando están conectados a una red Wi-Fi. Afortunadamente, esto es algo que todas las aplicaciones ofrecen entre sus características.
Poco espacio de almacenamiento
No cabe duda de que un smartphone, sobre todo con sus espectaculares cámaras y potentes procesadores, incita al usuario a sacar fotos de prácticamente cualquier cosa que vea, además de llenarlo con juegos, música, videos y documentos.
Esto inevitablemente conducirá a que en algún momento nos quedemos sin espacio para almacenar archivos, lo cual puede ser un importante problema si utilizamos el teléfono para trabajar.
En este caso, lo primero que debe mentalizarse el usuario es la necesidad de priorizar lo importante. Es decir decidir en el momento, o poco más tarde, lo que almacenará o lo que no. También es importante desinstalar aplicaciones o servicios que no usamos, así como documentos, libros, PDF, videos o fotos que ya no nos sirvan.
También es importante tener constancia cuando se trata de eliminar documentos o imágenes que vamos recibiendo, ya que si olvidamos hacerlo, el dispositivo en poco tiempo estará repleto de archivos que no necesitamos.
En el caso de las imágenes, lo mejor que podemos hacer es utilizar un servicio en la nube para almacenarlos, siendo en estos casos Google Drive, a través de Google Fotos, uno de los mejores disponibles.
Este servicio permite, además de almacenar las fotos que tomamos con nuestro celular en la nube, verlas desde cualquier dispositivo con Chrome instalado, pero lo mejor de todo es que permite, luego de subirla a la nube, eliminar la foto de nuestro dispositivo, con el consiguiente ahorro de espacio.
Cuidado de los cables de carga o auriculares
Una de las quejas que más solemos oír de los usuarios de teléfonos inteligentestiene que ver con los cables que son provistos como accesorios cuando compramos el dispositivo. La mayoría de ellos suelen ser de una calidad bastante cuestionable, y este hecho trae aparejado que se rompan, dejándonos sin la posibilidad de utilizar el teléfono hasta que consigamos un cable de reemplazo.
Esto aqueja tanto a usuarios de iPhone como de Windows Phone y Android, y la única solución posible es aumentar el cuidado cuando los manipulamos, o comprar cables de mejor calidad, siempre teniendo en cuenta que sean perfectamente compatibles con nuestro modelo y marca de teléfono.
Extremar las precauciones en este caso significa intentar no estirar los cables, no retorcerlos y no almacenarlos en lugares en donde se puedan enredar. También será útil no exponerlos al paso ni dejarlos en el piso, ya que los podemos pisar al caminar. Todo puede ser útil, pero tarde o temprano deberemos comprar uno nuevo, ya que inevitablemente, aun tomando todas las precauciones posibles, los cables terminarán rompiéndose.
Fuente: www.informatica-hoy.com.ar
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