Dicen que la nostalgia vende, y sin duda es así, existe un gran mercado de personas que se dedican a buscar objetos retro, desde maquinas de escribir, televisores, móviles, consolas de videojuegos, hasta juguetes y por supuesto cámaras, ya sea porque se trata de coleccionistas, o simplemente porque todo lo retro siempre ha estado ahí y siempre habrá gente que quiera consumirlo.
Uno de los ejemplos más sorprendentes es The Impossible Project, una iniciativa que arrancó en 2008 de la mano de un ex-empleado de Polaroid y el director de la Sociedad Lomográfica Internacional, quienes consiguieron dinero de inversores privados para adquirir la última fabrica, que estaba por cerrar, de película para cámaras Polaroid. El éxito de la venta de película los llevó a replantear el negocio y buscaron crear una cámara que tuviera esa vieja magia de las fotos instantáneas, que ahora es una realidad que lleva por nombre I-1.
La original cámara instantánea... reinventada
La I-1 es oficialmente la primera cámara instantánea de la compañía, que llega a atacar ese segmento nostálgico, pero que también está situado en la vanguardia tecnológica. Esta cámara es oficialmente la primera cámara con soporte a película 'Impossible type 600 film', la cual surgió de la última fabrica de Polaroid, ahora propiedad de Impossible Project, y que se basa en la vieja película descontinuada 'Polaroid 600 film'.
Prácticamente está heredando la esencia de Polaroid, ya que mantiene todas las funciones de cámaras como la SX70 o la 600, pero además la han dotado de un nuevo y atractivo diseño en color negro, pero con controles digitales, más acorde con los tiempos que vivimos.
Sin duda el elemento más atractivo es el "anillo avanzado de flash", el cual se ajustará de forma automática en función de la luz ambiente y la distancia de enfoque del sujeto, por otro lado se ha incorporado un sistema de batería recargable por medio de USB, también tenemos una app para smartphones desde la que podremos controlar, vía Bluetooth, elementos como la apertura, velocidad de obturación y ajustes en el flash, toda de forma remota, además de que esta app incluye herramientas creativas, como exposición doble, exposiciones largas, entre otras.
La I-1 saldrá a la venta el próximo 10 de mayo en la página web del proyecto, su precio será de 300 dólares y su idea no es competir con la gran cantidad de ofertas que existen hoy en día en el mercado de la fotografía instantánea, más bien buscan atacar el mercado de los nostálgicos de Polaroid y más apasionados a este viejo formato, además de que la compañía no posee la capacidad de hacer millones de cámaras, por lo que están apostando por la exclusividad.
Dicen que la nostalgia vende, y sin duda es así, existe un gran mercado de personas que se dedican a buscar objetos retro, desde maquinas de escribir, televisores, móviles, consolas de videojuegos, hasta juguetes y por supuesto cámaras, ya sea porque se trata de coleccionistas, o simplemente porque todo lo retro siempre ha estado ahí y siempre habrá gente que quiera consumirlUno de los ejemplos más sorprendentes es The Impossible Project, una iniciativa que arrancó en 2008 de la mano de un ex-empleado de Polaroid y el director de la Sociedad Lomográfica Internacional, quienes consiguieron dinero de inversores privados para adquirir la última fabrica, que estaba por cerrar, de película para cámaras Polaroid. El éxito de la venta de película los llevó a replantear el negocio y buscaron crear una cámara que tuviera esa vieja magia de las fotos instantáneas, que ahora es una realidad que lleva por nombre I-1.
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