Los misterios pueden encontrarse en el lugar más insospechado, incluso en nuestras propias casas. Esperamos siempre que el hogar donde pasamos la noche nos sirva de refugio contra todo mal pero, ¿y si el mal está ya dentro? Repasamos las casas encantadas más escalofriantes.
La casa de Amityville
El 112 de Ocean Avenue es la casa encantada por excelencia. Desde 1974 se sucedieron una serie de sucesos que marcaron toda la población de Amityville: el asesinato de una familia, los DeFeo, por el hijo mayor, Roland. Se decía que unas voces habían obligado a Roland a deshacerse de su familia. Sin embargo un año después, los Lutz se instalaron en aquella casa, y 28 días después tuvieron que salir huyendo, ya que durante ese tiempo ocurrieron infinidad de sucesos paranormales: apariciones, pisadas, levitaciones, así como olores nauseabundos y un sustancia gelatinosa, presumiblemente ectoplasma. A pesar de las pruebas, libros y películas que se han producido tras estos fenómenos, se dice que todo fue un trabajoso fraude, montado por el padre de familia George Lutz y el abogado defensor de Roland DeFeo, que estaba a punto de recibir sentencia. Por desgracia no sabemos si todo esto fue un montaje, ya que DeFeo sigue en prisión cambiando su versión de los asesinatos cada vez que pide una reducción de condena y George Lutz falleció en 2006 a causa de un paro cardíaco.
La casa Whaley
Esta casa fue construida entre 1855 y 1857, y se trataba de un terreno en que se había ahorcado el famoso criminal Yankee Jim Robinson. Cuando finalizaron las obras, la familia formada por Tomas Whaley y Anna Eloise Delaunay pudo disfrutar durante años de una lujosa casa, la primera construida de ladrillo en San Diego, con varios pisos de altura y un granero justo al lado. Desgraciadamente, con el paso del tiempo la felicidad de los Whaley se fue desvaneciendo: su segundo hijo, Thomas, murió a los 18 meses, y aunque después tuvieran otros tantos más, la mala suerte se cernió sobre ellos. Los negocios de la familia fueron destruidos por incendios, más tarde las hijas fueron creciendo, pero una de ellas se suicidó, pegando un tiro. No fue hasta 1890 cuando el propio Thomas Whaley moriría de problemas de salud, dejando a su familia a cargo de la casa. Los miembros restantes fueron falleciendo de vejez o enfermedad, hasta su última hija, Lillian, en 1953. Sin embargo San Diego quiso rendir homenaje a esta familia creando un lujoso museo, que durante décadas se ha convertido en una de las casas encantadas más famosas de los Estados Unidos. Los visitantes alegan haber escuchado llantos de bebé, risas de niños, así como varias figuras incorpóreas que se pasean o aparecen reflejadas en los espejos.
La casa LaLaurie
La casa LaLaurie se ubica en Nueva Orleans, y es una casa encantada con una macabra historia detrás. Fue comprada por Marie Delphine LaLaurie, una mujer de alta clase social que junto con su marido Louis Lalaurie, se convirtieron en el matrimonio más famoso de la época. Como no es oro todo lo que reluce, el 'boca a boca' comenzó a decir que Delphine tenía muy mal genio, y que maltrataba a sus numerosas esclavas y sirvientas afroamericanas: una de ellas le estaba cepillando el pelo, con los consecuentes tirones, que enfurecieron a Delphine, que echa una furia persiguió a su criada con un látigo hasta que cayó por la ventana y murió. Gracias a los contactos y fama de los LaLaurie este suceso pasó inadvertido, hasta que años después se sucedió un terrible incendio en la mansión. Cuando los bomberos sofocaron las llamas, encontraron el horror: cuerpos mutilados, famélicos, enjaulados y muertos yacían escondidos por la casa de los LaLaurie. El matrimonio logró escapar huyendo del país, pero la casa quedó marcada para siempre. Se dice que espíritus vagan por sus pasillos , enfurecidos, víctimas de un dolor no merecido.
La Casa Winchester
Se dice que esta casa es una de las más misteriosas de todo los EEUU. En su interior podemos encontrar escaleras que no llevan a ninguna parte, habitaciones falsas, así como interminables pasillos sin salida. Fue construida durante 40 años, y está sin terminar. Todo comienza en 1884, cuando la viuda Sarah Winchester contacta con una pitonisa para saber por qué su marido y su hija han fallecido. Obteniendo como respuesta que la familia Winchester (famosa por sus rifles) está maldita porque sus armas mataron a cientos de personas durante la conquista del lejano oeste. La casa estuvo construyéndose hasta 1922, año en que Sarah Fallece. Desde entonces sirve como reclamo turístico para los viajeros más fanáticos del misterio, y pueden visitar la mansión Winchester sin problemas, donde pueden ver (según se dice) huellas de manos, figuras incorpóreas y el reflejo de Sarah en los únicos espejos que hay instalados en la casa.
Casa Crenshaw
Conocida también como la casa embrujada de Hickory Hill o la casa vieja e los esclavos, es una gran mansión construida por John Crenshaw, un adinerado del sur de Illinois gracias a sus pioneros negocios con la sal. Durante varias décadas el negocio de Crenshaw continua en pie, pero su nombre empieza a desprestigiarse por su poco ortodoxa forma de tratar a sus esclavos. Se llegó a decir que perdió una pierda, cortada por un esclavo que defendió a un compañero de su amo. Tras esto sus tierras fueron vendidas y sus esclavos desaparecieron, terminando el propio Crenshaw viajando a otra zona del país, arruinado. En 1871 John Crenshaw falleció, siendo enterrado en el cementerio de Hickory Hill, junto a la mansión. Más tarde, en 1906, fue comprada por los Sisk, descendientes de Crenshaw, que la tuvieron hasta 1999, cuando fue comprada por el estado de Illinois para ser nombrada patrimonio histórico del estado.
Cortijo Jurado
La piel de toro española también tiene sus casas llenas de misterio, y la que nos ocupa está ubicada en Andalucía. Allí está el cortijo jurado, una vieja hacienda que durante el siglo XIX fue propiedad de una adinerada familia, los Heredia. La Leyenda Urbana decía que eran masones, y que realizaban actos satánicos. No fue hasta que comenzaron a desaparecer niñas en aquellas zonas, cuando los vecinos comenzaron a sospechar de sus vecinos, además de los Heredia se hablaba de los Larios que también tenían una casa al otro lado del río, el Cortijo de Colmenares, que estarían conectados mediante túneles que utilizarían para no ser vistos. Se dice que en los sótanos ocultos hay diversa maquinaria para torturar, así como imágenes de devoción a Satán. En la actualidad se tiene previsto transformar el Cortijo Jurado en un lujoso hotel, y se están realizando los convenientes trabajos de rehabilitación del edificio, que lleva abandonado desde hacía décadas.
Edificio 'Duende'
Situado en la calle Gascón de Gotor número 2 en Zaragoza, este edificio aterrorizó a una familia durante septiembre de 1934. Lo que ocurrió allí jamás tuvo explicación. Pascuala Alcocer, criada de la familia Grijalba, escuchó a alguien llamarla por su nombre, mientras limpiaba la cocina. Sin saber de dónde provenía la voz, lo dejó pasar y se fue a su casa. Días después volvió la misma voz, esta vez riendo e insultando: provenía de la hornilla de la cocina. La policía se personó registrando la casa, pero no obtuvieron resultado. Se llegó a levantar el suelo de la cocina, pero ni por esas se resolvió el caso. El misterio continuó cuando uno de los policías preguntó a la voz de la hornilla "¿Qué quieres hombre?", a lo que la voz contestó "No soy un hombre". El juez que llevó el caso dictaminó que Pascuala hacía las voces de forma inconsciente, por lo que fue odiada por toda Zaragoza, y posteriormente expulsada. Se dice que un día inesperado de diciembre de 1934 la voz desapareció, justo el mismo día que fallecía una vecina del lugar, a causa de una sesión de espiritismo.
La casa de América
Ubicada en pleno centro de Madrid, conocido como 'Palacio de Murga', 'Palacio de Linares' o 'Casa de América', este palacete contiene una de las leyendas más misteriosas de toda España. Según cuentan, un posible incesto entre los miembros de al familia habrían dado a luz una niña que fue emparedada por su madre en las paredes del palacio de linares. Durante décadas se estudió este caso, sin resultado alguno, hasta que en el año 1990 se decía que habían encontrado la voz de Raimunda, la madre de la criatura emparedada, llorando por volver a ver a su hija. Misterios y habladurías terminaron desprestigiando a la investigadora que recogió las psicofonías, y toda la historia del palacio de linares quedó en el olvido. Por fortuna en ocasiones vuelve esta historia a la palestra como muestra de lo que pudo ser un auténtico fantasma en el centro de Madrid.
La Casa Blanca
El lugar más importante de los Estados Unidos es también el más embrujado. Se dice que desde su construcción en 1972 ha albergado a 44 presidentes de la nación americana. Desde que falleciera asesinado el presidente Lincoln, se dice que su espirito recorre los pasillos de la Casa Blanca y alerta de su muerte a todo aquel se cruza con él. Se dice que Churchill se encontró con él en una visita a América, así como la princesa Wildhemina de Holanda, o el propio Roosevelt. Además no solo se vería a Lincoln, sino también a Thomas Jefferson, que se ve tocando el violín por los pasillos presidenciales. El último misterio de esta casa lo tiene el presidente Barack Obama, que aparece en una fotografía junto a una cristalera, y lo que parece ser una cara...
Calle Real
El fenómeno paranormal más importante del siglo XX sucede en la Calle Real número 5 de Bélmez de la Moraleda, en Jaén. Desde 1971 se generaron una serie de macabras caras en el suelo de la cocina de María Gómez Cámara, la última superviviente d e una familia que pereció durante la guerra civil. Tras varias décadas de investigación y rumores, María falleció en 2004, llevándose consigo el misterio de las caras. Los estudiosos lo tildaron de fraude, aunque difícilmente demostrable, ya que una anciana con escasos conocimientos en química era completamente incapaz de hacer lo que los investigadores dieran como razón (una reacción química compleja). Desde 2014 la casa de María está cerrada pero se abre a los turistas que aún se acercan a Bélmez para ver si continúan generándose en las paredes.
Fuente: www.que.es
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