¿Por qué nos apresuramos a la tienda en cuanto tenemos algo de dinero disponible? Con cada nueva adquisición nos sentimos más felices, sin embargo, después de unos días no queda ni un rastro de esa alegría.
Resulta que nuestro peor enemigo es la costumbre. Cuando la compra se vuelve costumbre, el nivel de satisfacción con la vida cae y estamos obligados a correr tras una nueva adquisición. Y así sucesivamente.
Sin embargo, las investigaciones de la Universidad de Cornell rompieron este círculo vicioso. El profesor de psicología Thomas Gilovich comprobó que sentimos la misma felicidad al comprar algún objeto deseado que durante los viajes. Y, sobre todo, el nivel de la alegría, vinculado a una adquisición, cae, mientras que las emociones y experiencias recibidas durante un viaje, siguen activando las hormonas de la felicidad durante mucho tiempo.
Visitar distintos eventos, viajes, obtener nuevas habilidades así como experiencias extremas, todo esto es la felicidad perfecta para cada uno de nosotros. Un nuevo dispositivo electrónico o incluso un automóvil con el tiempo se convertirán en una costumbre, pero cada recuerdo será la fuente de una verdadera alegría que quedará contigo para siempre.
El contenido del post no es de mi autoría, y/o, es un recopilación de distintas fuentes.
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