Exponerse al sol sin protección daña la piel y los ojos, y puede provocar envejecimiento prematuro, manchas, e incluso cáncer.
La exposición al sol sin protección provoca daños que se acumulan día a día en la piel. Esta tiene efecto memoria, es decir, que el exceso de luz solar queda registrado sobre la piel y, cuando se ha producido una quemadura en el cuerpo, con el paso del tiempo puede provocar el envejecimiento prematuro de la piel o, dependiendo de la gravedad, causar distintas lesiones como manchas, alergias, cáncer, etcétera.
Por ello, lo mejor es prevenir estas situaciones utilizando protectores solares adecuados, y siguiendo una serie de pautas como aplicarlos media hora antes de exponerse al sol, reponiendo el producto periódicamente, y evitando las horas de máxima intensidad lumínica (entre las 12 y las 4 de la tarde).
La respuesta es “tal vez”, y solo en el caso de que no pueda controlar la cantidad solar a la que se expone. Por ejemplo, si su trabajo de todos los días es al aire libre, o si necesita proteger algunas áreas sensibles de su cara, como el área alrededor de los ojos que son particularmente susceptibles al foto envejecimiento y que no afecta la producción de vitamina D si los cubre con protector solar.
los bloqueadores solares impiden el 97% de vitamina D que entra a la piel y al cuerpo. A consecuencia de la protección inadecuada a rayos UV. Muchas personas que utilizan bloqueadores podrían estar en riesgo de desarrollar melanomas ( MELANOMA es un cáncer que se origina en cierto tipos de células en la piel ) porque al pensar que están bien protegidos se exponen por mas tiempo al sol, El melanoma es la causa del 75% de todas las muertes relacionadas al cáncer de la piel.
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