Apple iMac Pro
Tras cinco años de reiteradas caídas, en 2017 se ha recuperado parte del mercado de los ordenadores. La informática convencional no pasa por su mejor momento como consecuencia de la gran explosión en ventas del dispositivo estrella de la última década, el teléfono móvil inteligente.
Mientras los fabricantes exploran nuevas fórmulas híbridas como los ordenadores convertibles o «2 en 1», el concepto tradicional de ordenador puramente diseñado para ubicarse en un lugar determinado del hogar o el propio del entorno laboral ha venido perdiendo interés en detrimento de otras ideas más transportables. Aún así, tiene aún su público. Los datos de las consultoras IDC y GfK establecieron que a lo largo del año se alcanzaron picos de subida: la venta de ordenadores en el primer trimestre del año 2017 subió un 0,6%, rozando los 60.3 millones de unidades en todo el mundo.
Un pequeño crecimiento explicado en la metodología empleada en la que se recoge el stock dedicado por los fabricantes de ordenadores. A falta de cerrar el año con el cómputo general, las firmas HP y Lenovo se han disputado el trono de ranking de vendedores, seguido de Dell y Apple. Precisamente esta última marca ha renovado este año algunos de sus productos. Uno de ellos, el iMac, ha introducido más potencia y una mejor pantalla en este «todo en uno» de altos vuelos.
Este modelo, uno de los más interesantes del año, dispone de varias configuraciones y dos versiones diferenciadas por el tamaño del monitor. Una versión recomendable es el modelo con 21.5 pulgadas de pantalla capaz de generar una resolución 4K, el estándar de imagen a perseguir por la industria que se ha convertido ya en lo más goloso de los televisores. Bajo el capó se encuentra un potente motor destinado a mover todos los resortes con fluidez y solvencia. El modelo de 27 pulgadas asombra, además, por ofrecer lo que han llamado resolución 5K, siendo por tanto la pantalla la gran protagonista.
Dado que este equipo está pensado para la productividad, la idea es que se desenvuelve perfectamente en cualquier tarea, desde diseño a edición audiovisual. Para ello, se ha optimizado con procesadores Intel i5 de séptima generación de cuatro núcleos a una frecuencia de reloj de 3 GHz -existe otra versión superior, que se mueve a 3,4 GHz- acompañados de 8 GB de memoria a 2.400 MH -ampliable hasta 16 GB según necesidades-, que sobre el papel le confiere un rendimiento apabullante. Sale airoso sin contemplaciones. Se incluye la tarjeta gráfica Radeon Pro 555 con 2 GB de memoria de vídeo.
En cuanto al resto de especificaciones técnicas, el equipo soporta hasta 1 TB de capacidad de almacenamiento y se encuentran dos puertos UBS-C Thunderbolt 3, es decir, que permite velocidades de hasta 40 Gbps (conexión más rápida y más versátil con cualquier replicador de puertos, pantalla o dispositivo de datos). Con acabado en aluminio, el dispositivo de la firma americana ha querido imprimir diseño y creatividad como dos de sus pilares básicos en sus propuestas. Hay que tener en cuenta que con la última versión del sistema operativo, MacOS High Sierra, la plataforma también soporta contenido en realidad virtual. Precio: 1.299 euros.
Microsoft Surface Studio
Otro de los productos que deja este año y que será importante seguirle la pista es el Surface Studio, sobre todo, por lo que pueda inspirar al resto de fabricantes. Una propuesta de Microsoft también definida para el público más exigente que, pese a lo interesante de sus prestaciones, es demasiado caro todavía. Aún así, tiene aspectos a tener en cuenta por su capacidad de disrupción y la innovación planteada por la firma americana, que ha dado un vuelco a su estrategia con el esfuerzo cada vez más en fabricar hardware.
Y el equipo sorprende, pero para bien. Dispone de un monitor de 28 pulgadas -con pantalla táctil- que es capaz de ponerse casi en horizontal respecto a la mesa, permitiendo dibujar o tomar notas sobre él como si se tratase de un enorme cuaderno. Para ello, se requiere de un dispositivo redondo llamado Surface Dial, una especie de botón que se sitúa sobre la pantalla e interactúa con nosotros, ofreciendo interesantes herramientas a tiempo real.
Como si se tratase de una ruleta de esas que sirven para desbloquear las cajas fuertes, podremos girar el Surface Dial para -por ejemplo- cambiar los colores que queremos utilizar mientras pintamos sobre la pantalla. Casi ejerce de lienzo digital. Asimismo, al pulsar sobre él ofrece diferentes opciones. Un interesante periférico que habrá que probar a fondo para ver su utilidad real. La idea es brillante y puede coronarse como el PC de sobremesa más innovador del año.
Además, no va escaso prácticamente de ningún componente y aspecto técnico. Porque el equipo tiene alma de maratoniano y aguanta perfectamente el esfuerzo en cada tarea. Se puede configurar con procesadores Intel i5 o i7 y hasta 32 GB de memoria RAM. A nivel visual, el dispositivo es elegante y está fabricado en aluminio.
También se incluye la tarjeta gráfica Geforce 980M, aunque se echa en falta más potencia con modelos superiores de Nvidia, y alberga hasta cuatro puertos USB 3.0, aunque se echa de menos otras conexiones. Surface Studio también está preparado para interacciones por voz. Gracias a una serie de micrófonos desplegados en su chasis, se puede invocar al asistente Cortana para realizar varias operaciones. Precio: 2.999 euros.
HP Envy Curved «All in one»
Potente, competente y equilibrado. Así es el Envy Curved All in One, un equipo de altas prestaciones de la firma HP, que destaca especialmente por su monitor curvado de 32 pulgadas y resolución 3.440 x 1.440. Pero su gran baza es su relación de 21:9 que lo hace ultrapanorámico. Un área de trabajo ideal, pues, para ciertas actividades en el diseño. Se echa en falta que el panel sea táctil.
Este PC tampoco queda relegado a un segundo plano a nivel técnico, ya que ofrece varias configuraciones técnicas que empiezan desde procesadores Intel i5 de séptima generación y 8 GB de memoria. Guarismos estos que prometen un rendimiento solvente, sobre todo en su versión de chips i7 y 16 GB de memoria que, se supone, no hay nada que se le resista.
En su interior, el dispositivo viene con las tarjetas gráficas Nvidia 950M y 1 TB de capacidad, espacio más que suficiente como para guardar multitud de proyectos, y disco duro SSD de 256 GB. Especial mención es su equipo de audio, potente (compuesto por seis altavoces frontales) al igual que todo su conjunto, gracias a su proveedor Bang & Olufsen, una firma de prestigio en el campo del sonido. Funciona con Windows 10 Home. Todo está bien integrado dentro de la pantalla por lo que es discreto. Precio: 2.999 euros.
Asus Zen AIO Pro z240ie
Otro «todo en uno» a tener en cuenta y que resume prácticamente lo que ha deparado el año es este modelo de la firma asiática Asus. Lo primero que llama la atención es su pantalla, del tipo IPS y multitáctil con 10 puntos hasta alcanzar resoluciones 4K (3.840 x 2.160) que no solo muestra los detalles más pequeños, sino que además ofrece colores vivos y realistas y amplios ángulos de visión de 178 grados.
En el interior se encuentran los procesadores hasta Intel Core i7 más modernos -existe una versión poco recomendable, la verdad, que empieza con chips i3-, memoria DDR4 de vanguardia, hasta el almacenamiento SSD de 512 GB, tarjetas gráficas para juegos hasta Nvidia GeForce GTX 960M, una combinación de características perfecta para ofrecer una capacidad de respuesta de una fluidez espectacular.
Así que potencia no le falta, de hecho es considerado el más potente del año. El equipo incorpora seis canales de audio que le otorgan hasta 16 watios de sonido. Escaso en comparación con un altavoz de una cadena de audio pero suficiente para escuchar con decencia. Precio: 1.299 euros.
Acer Aspire S24
Sobrio, fino y austero es este otro PC de sobremesa, que sirve para recordar el año 2017. La pantalla, casi sin bordes, le dota de un aspecto arrebatador a la par que elegante. Al ser ultraplano (marcos de solo 2,7 milímetros), todo el conjunto le da una sensación de minimalismo al alcance de muy pocos.
Por sus tripas discurren los nervios y venas más potentes del mercado. Porque su apuesta por el hardware es evidente. Con chips de i7 de octava generación, el equipo se mueve con garantías. No le hace ascos a otros apartados donde ha hecho un esfuerzo en innovar como la posibilidad de cargarse de manera inalámbrica gracias a su sistema de carga tipo Qi, el estándar más extendido en la industria.
Cuenta con una pantalla de 23.8 pulgadas y resolución Full HD -ciertamente cuestionable en los tiempos que corren- y un equipo de audio compuesto por dos altavoces y un subwoofer que soportan la tecnología Dolby Audio. Todavía no ha salido a la venta, pero se prevé que llegará a principios del año que viene por unos 1.000 euros.
Lenovo Ideacentre AIO 520 s
Otra de los grandes fabricantes del sector que sigue defendiendo su área de sobremesas es Lenovo. Uno de sus modelos es este, que destaca por ser muy compacto y ligero como elegante. Incorpora una pantalla multitáctil sin bordes de 23 pulgadas y amplio ajuste con una potencia de procesamiento mejorada. Si a eso le añadimos una tarjeta gráfica independiente y un sonido estéreo envolvente, descubrirás en este todo en uno la solución perfecta para el entretenimiento sin complicaciones.
También apuesta por un diseño casi sin bordes, aunque sin lograr la máxima expresión. Este centro multimedia viene equipado con procesadores Intel Core i7 de séptima generación y una tarjeta gráfica independiente Nvidia GeForce GT930. Además, está equipado con Dolby Home Theatre, que ofrece reducción de ruido, optimización de los altavoces y un sonido estéreo envolvente, y cuatro puertos USB 3.0.
Dell All in One Inspiron 27 7000
No podía faltar otro clásico del sector con su contribución esta temporada con un robusto equipo que, sin innovar en muchos de sus aspecto, cumple con creces lo que promete. Preparado incluso para gestionar contenidos inmersivos en realidad virtual, viene con chips AMD Ryzen 5 1400 a 3,4 GHz y memoria de 8 GB, así como una tarjeta gráfica de la serie AMD Radeon RX 500 con memoria GDDR5.
Su pantalla tipo IPS, de 27 pulgadas, aguanta resoluciones a 4K y destaca, a su vez, por su sonido envolvente gracias a un subwoofer y a altavoces de alto rendimiento. El ajuste del audio de Waves MaxxAudio Pro ofrece una calidad de sonido sin igual que proporciona aún más entretenimiento.
El contenido del post no es de mi autoría, y/o, es un recopilación de distintas fuentes.
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