Expresar el dolor emocional se ha convertido en algo impopular. Aunque ningún ser humano escapa del sufrimiento, se ha vuelto común rechazarlo. Los brazos se abren para quienes son “positivos” y tienen “buenas energías”. Los ojos y los oídos se cierran para quienes sufren, porque pareciera que el dolor es un mal contagioso.
Lo cierto es que los seres humanos, más tarde o más temprano, experimentamos sufrimiento. Unos más que otros, pero todos lo sentimos alguna vez. En esas circunstancias resulta indispensable tener la posibilidad de expresar el dolor emocional. Reprimirlo lo hace más fuerte e impide que se procese.
“Si no está en tus manos cambiar una situación que te produce dolor, siempre podrás escoger la actitud con la que afrontes ese sufrimiento”.-Viktor Frankl-
Lo malo es que muchas veces no sabemos cómo expresar el dolor emocional. En últimas, las palabras siempre se quedan cortas. Pero además de esto, muchas veces tampoco son suficientes para atenuar ese sufrimiento. Por eso, te damos algunas claves que te permitirán manifestar lo que sientes de una manera más eficaz.
1. Decirlo en voz alta
Aunque no lo parezca, hay una gran diferencia entre pensar el dolor y decirlo en voz alta. El pensamiento está envuelto en palabras. También mantenemos un diálogo interno constante. Sin embargo, este no nos exige mayor orden, ni precisión en las ideas.
Cuando las cosas se dicen en voz alta ocurre un proceso interesante. Deben ordenarse las ideas para que el mensaje sea coherente y comprensible. También deben concretarse y precisarse los hechos, para darlos a entender. Por eso decirlo en voz alta ayuda a hacer catarsis. Ni siquiera tienes que decírselo a otra persona. Basta con que lo digas para ti. Ojalá lo grabes y te escuches.
2. Aprender a descargar tensiones con actividades relajantes
El sufrimiento te imprime una mayor tensión emocional. Hay una sensación de displacer y de incomodidad de la que es difícil deshacerte. También es posible que caigamos en estados de extrema alerta, o de adormecimiento molesto.
Nada mejor que el ejercicio para eliminar parte de esa sobrecarga emocional. La actividad física cambia nuestro foco de atención. También activa procesos neuronales que inducen a un mayor sentimiento de bienestar.
3. Explicar, algo fundamental para expresar el dolor emocional
La gente se ha vuelto muy intolerante al sufrimiento ajeno. De ahí que expresar el dolor emocional a otros a veces sea tan difícil. No se quiere molestar a los demás, ni tampoco sentir su rechazo. Sin embargo, a veces resulta imposible, al menos momentáneamente, quitarse de encima ese estado de ánimo sombrío.
Lo mejor en estos casos es explicarles a los demás el proceso que estamos atravesando. Hacerles ver que estamos pasando por un momento difícil y que es posible que no salgamos automáticamente de allí, sino que aún debemos procesar lo que sentimos. De este modo, las demás personas tendrán más elementos de juicio para interpretar lo que nos pasa, sin que esto conduzca al conflicto.
4. Evitar el conflicto en torno a lo que sientes
Lo usual es que el sufrimiento también nos lleve a estar más irritables y, a veces, intolerantes con el mundo. En ocasiones caemos en la tentación de canalizar nuestras frustraciones y malestares enemistándonos con los demás.
Es importante evitar que esto ocurra, pues al final solo va a añadir más peso a la situación con la que ya cargas. Por eso lo indicado es simplemente no entrar en discusiones con nadie, respecto a nada. Si lo haces, es posible que termines enfrascado en un conflicto que no va a aportarte nada bueno. Mejor elude las confrontaciones.
5. Llevar un diario
El diario es una herramienta que se usa desde tiempos antiguos para diferentes fines. Uno de ellos, expresar el dolor emocional. Así como se produce una reorganización de las ideas al pasar del pensamiento al lenguaje de viva voz, también se da lugar a una nueva reorganización, más profunda y precisa, en el lenguaje escrito.
El acto de escribir constituye una vía de catarsis. Pero además de ello, te da una nueva perspectiva. Al leer lo que has escrito te ves un poco desde fuera. Esto ayuda a procesar mejor las emociones y a ponerlo todo en un marco racional. A veces, también, a darle una salida creativa al sufrimiento.
Todos estos medios para expresar el dolor emocional son muy valiosos. Cualquier opción es mejor que callar, reprimir o mantenerte inerme frente al dolor. Hay que sacarlo, liberarlo, a través de todos los medios que haya a tu alcance. Expresarlo es la única manera de procesarlo y superarlo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario