QUERIDOS REYES MAGOS, ¿POR QUÉ NUNCA ME TRAJISTEIS NINGUNO DE ESTOS REGALOS?

Con los Reyes Magos tan importante como todos aquellos regalos que te trajeron de pequeño son todos esos otros que aunque tú los pedías año tras año, por alguna extraña razón, nunca llegaron a aparecer junto a tu zapato.

Juguetes que nos marcaron porque, a pesar de verlos continuamente anunciados por la tele, nunca llegamos a poder tocarlos. Estoy seguro que todos tenemos algún juguete en forma de espinita clavada, los míos son tantos que me dan para crear toda esta lista. A ver si este año hay más suerte.

Auto-Cross

No recuerdo ni una sola carta a los Reyes en la que no incluyera el Auto-Cross de Congost. Esa llave de contacto, su cambio de marchas y esa pequeña pista llena de desniveles me tenía totalmente fascinado… pero nada. A pesar de ser uno de los juguetes más populares de los 70 y 80, en sus diferentes versiones, no llegué a conocer a nadie que lo tuviera y por lo tanto jamás pude demostrar mis habilidades al volante. ¿Será por eso que se me da tan mal conducir?

Laberinto de Congost

El juego no podía ser más simple, un laberinto circular lleno de agujeros y un mando para controlarlo. Dependiendo de dónde cayera la bola una diferente puntuación pero yo jamás conseguí ni un solo punto pues jamás lo probé. Aún sueño con poder echar una partidita algún día.

Simon

Hoy en día el Simon es todo un icono de aquella época, pero ¿realmente fue tan popular en nuestro país? A mis Reyes Magos su nombre les debía sonar muy extraño y pasaron olimpicamente de él año tras año. Hoy lo sigo echando de menos en la estantería de mi habitación ¿hay algún juguete más colorido?

Ibertren

Yo quería un tren gigante, como esa maqueta enorme con tuneles y todo con la que aquel papá jugaba con su hijo en la caja del Ibertren. En su lugar tuve un pequeño trenecillo con tres vagones y 20 raíles de vía en el que el decorado me lo tenía que imaginar y montar yo mismo gracias a los Clicks. Nada que ver.

Scalextric

No sé si por falta de espacio o de dinero (yo creo que más bien esto último), el caso es que nunca tuve un Scalextric. Hoy lo recordamos como uno de los juguetes más clásicos de aquella época pero os puedo asegurar que te tenías que haber portado muy muy bien para que los Reyes te lo trajeran. ¿Tú tuviste suerte?

BigTrack

Tras varios años jugando con aquellos coches teledirigidos con cable de Rico, la llegada del BigTrackfue todo un shock, aquello era un puto robot. A un amigo se lo trajeron sus padres de EEUU y claro, yo también quería aquel tanque espacial al que programabas los pasos y se movía solo por toda la casa. Recuerdo que valía una pasta y mis padres jamás salieron de España. Los Reyes Magos dijeron que no.

Casio-Tone

La música me fascina pero desde pequeñito mis padres se empeñaron en que tocara el ¡acordeón! y mi paso por el Conservatorio con solo 8 años fue una experiencia tan traumática que en mi casa no volvió a haber ningún otro instrumento musical. Si los Reyes me hubieran traído ese Casio-Tone que tantas veces les pedí hoy seguro que sería una estrella internacional de la electrónica o al menos haría mis tournés acompañado de una cabra.

BlasterGame

Como aquellas máquinas de marcianitos de la tienda del jefe pero sin necesidad de tener que echar monedas, yo esto me lo pido para Reyes sí o sí. Pues no. Afortunadamente muy pronto llegaron todas aquellas otras maquinitas de bolsillo, bastante más económicas, y entonces ya sí, poco a poco nos fuimos olvidando de la sala de recreativos.

Spectrum

Aquí metí la pata hasta al fondo, por anticiparme. Le pedí a los Reyes aquel Home Computer de Philips y por el precio que tenía fue la única consola que tuve sin opción a disfrutar del Spectrum. Lo hubiera preferido mil veces, a pesar de lo que tardaba en cargar cada juego.

B-H California

Estoy convencido de que todos aquellos afortunados que tuvieron una B-H California han triunfado en esta vida, era todo un símbolo de poder, habrán sacado mejores notas y sobre todo, lo más importante, habrán ligado mucho más. Yo no pasé de la BH clásica, la de toda la vida, en roja o azul. Ni una pedaleada en aquella bici amarilla que no pesaba nada y parecía que volaba.

Seguro que tú también tienes alguna asignatura pendiente con los Reyes Magos, ¿que juguete no te trajeron nunca por mucho que se lo pediste?

Fuente: http://yofuiaegb.com