La firma emprendedora Monhm, con base en la ciudad californiana de Berkeley, se encuentra detrás de este teléfono inteligente que parece marcar el inicio de la era post-smartphone, ya que está dirigido en especial a aquellas personas que de vez en cuando quieren desconectarse de todo y de todos. Por supuesto, también se caracteriza por ese diseño circular, tan innovador en la industria de la telefonía móvil, con una estética muy similar a la de los relojes de bolsillo.
Según explica la compañía, "Runcible es tan potente como un smartphone moderno, pero está diseñado para mantenerse en silencio, para no interrumpirte nunca y para usar toda esa potencia para mejorar tu vida real en lugar de tirar constantemente de vos hacia el mundo digital". Cuando lo consideres oportuno, el dispositivo, del tamaño de la palma de una mano, puede realizar cosas propias de un smartphone, como sacar fotos, navegar en internet o conseguir direcciones, pero el resto del tiempo permanece en silencio, sin agobiarte con notificaciones, a la espera de tus órdenes.
Aún quieren mejorarlo más, pero esta versión cuenta con un procesador Qualcomm Snapdragon 410, 1 GB de memoria RAM y 8 GB de memoria interna. Su sistema operativo es BuniOS, basado en Android 5.1. Su conectividad es limitada, ya que es compatible con wifi y Bluetooth, pero de momento no podrá conectarse a internet usando datos móviles (aunque se espera que en futuras etapas del proyecto sí se pueda). Asimismo, entre sus prestaciones destaca un reloj analógico, una brújula y una cámara integrada de 7 megapíxeles. Su pantalla circular es de 2,5 pulgadas y cuenta con una resolución de 640 x 640 pídeles.
Los fondos de esta campaña de crowdfunding estarán destinados a perfeccionar el proceso de fabricación del Runcible "de una manera sostenible y responsable", explican desde Monhm. Así, por ejemplo, las cubiertas de madera del modelo Lovelace provienen de árboles de California explotados de una manera sostenible. En cuanto al precio, parte desde los 399 dólares de la versión básica, llamada Babbage y fabricada con plástico reciclado, hasta los 499 dólares del Lovelace, realizado en madera. Al parecer la campaña de recaudación tiene éxito, ya que en sólo unos días han reunido el 52% de los 250.000 dólares que necesitan.
El contenido del post no es de mi autoría, y/o, es un recopilación de distintas fuentes.
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