La Xbox One es una de nuestras pasiones, pero como tal en ocasiones también puede dar algún que otro problema. Aunque en muchas ocasiones queremos recurrir a Microsoft, podemos tener la solución en nuestra mano y de una manera más sencilla de lo que podamos imaginar.
Es por ello que hoy te presentamos algunas soluciones. Esos remedios a losproblemas más básicos que pueda tener la Xbox One. Así que, antes de desesperarte o pensar que ya no hay nada que hacer y que te quedarás varios días sin consola, descubre lo que te mostramos y aplícalo.
La unidad de disco tiene ruido
Uno de los problemas al que podemos enfrentarnos es éste. La unidad de disco puede tener un cierto ruido. Algunas personas han comentado que se trata de un ruido bastante intenso. Pero hay que decir que realmente no daña el disco. Si te hace este ruido y además te sale un mensaje de: “No se puede reproducir el disco”. Prueba con otro, antes de llegar a desesperarte. Con un problema como éste, Microsoft permite que hagas una devolución de la consola.
Más que nada porque, ante un problema como éste, lo cierto es que las soluciones no son fáciles de encontrar. Ojalá pudiéramos arreglarlo en casa, pero no es nada sencillo. Si intentas solucionarlo, recuerda que al manejar el aparato, hasta puedes perder la garantía del mismo. Así que, puedes devolverla en el lugar donde la compraste o bien, ponerte en contacto con Microsoft y ellos te pueden mandar una consola de reemplazo.
Actualización de la consola
Como bien sabemos la Xbox One también tiene su fase de actualización. Se trata de actualizaciones obligatorias que necesita hacer. Pero en ocasiones no se llevan a cabo como deberían. Aparecerá un mensaje diciendo que hay un problema con la actualización. Este problema podría venir de la conexión a internet. Porque no nos damos cuenta y puede que ésta se haya caído en un momento dado. Si es así, ya interrumpe todo el proceso en marcha.
Si esto ocurre, asegúrate de que la conexión es correcta. Del mismo modo, si lo es, puedes esperar unos minutos y volver a intentarlo. En ocasiones se colapsa si hay muchos usuarios descargando las actualizaciones al mismo tiempo y esto ya sería culpa de Microsoft y no de tu conexión. Otra de las soluciones es apagarla, manteniendo pulsado el botón de inicio durante unos 5 segundos. Desenchufamos, esperamos unos 30 segundos, volvemos a enchufar y a encender. Esto va hacer que la tarjeta ‘Red’ de tu equipo se restablezca.
Mi Xbox One no enciende
Seguro que te has encontrado con este problema en alguna ocasión. Es algo que nos da mucha rabia, porque ya directamente no enciende y no sabemos qué es lo que le ocurre. En ocasiones, se enciende solo durante un corto espacio de tiempo pero luego, se vuelve a apagar. Aquí tendrás que revisar que todos los cables estén en su sitio, correctamente conectados. Todos ellos tienen una luz, que será la que indique que todo va viento en popa.
Cuando vemos una luz blanca o naranja, es que está todo correcto. Si alguna de ellas parpadea o directamente no está encendida, es hora de preocuparnos pero lo justo. Si se trata de la fuente de alimentación, que no le llega la corriente, tienes que reemplazarla. Para ello, cuando compras una Xbox One, debes registrarla. Así, la podrás solicitar vía on line y te llegará una nueva. Claro que si es el controlador quien no puede encender la consola, aprieta el botón de encendido.
Un apagón inesperado
Aunque pueda parecer similar a otro problema que hemos mencionado de la Xbox One, no lo es tanto. En este caso hablamos de que se trata de un apagón que se produce de forma inesperada. Lo más común es que haya un mal funcionamiento por parte de la consola. Primero, lo que debemos controlar es la ventilación de su sistema. Porque si se calienta en exceso, puede que se apague. Aunque lo lógico es que apareciera un mensaje antes de ello. Tienes que asegurarte que la consola tenga la ventilación necesaria y volverás a encenderla.
Eso sí, para asegurarnos de que se ventila, espera una hora aproximadamente, para volver a encenderla. Si la luz del bloque de alimentación parpadea o tiene una tonalidad muy oscura, entonces hablaremos de un problema de energía. Comprueba si tu consola está preparada para poder apagarse de manera automática. Para ello, tienes que ira ‘Configuración’, luego irás a ‘Encender y suministrar’ y por último, ‘apagar después’. Puedes elegir la opción que nos da de ‘No apagar automáticamente’.
La televisión no tiene buena resolución
A veces no conseguimos tener la visualización adecuada. Quizás de todas las mencionadas, es una de las soluciones más rápidas y al mismo tiempo, sencillas. Tenemos que ir al Menú para poder desplegar la configuración. Luego, pincharemos en ‘Pantalla y sonidos’. Finalmente, elegimos ‘Resolución de TV’. Dentro de este último punto, ya podrás seleccionar la resolución que se adecuada.
Cierto es que cuando pensamos que la solución es muy sencilla, se nos va complicando por momentos. Pero como bien decimos, siempre habrá una opción que nos libre de todo ello. Así que, si después del paso anterior, todavía tienes problemas con la resolución, es el momento de optar por un cable HDMI, que sea diferente. Porque en él puede estar el problema. Claro que si ya con esto no lo consigues, entonces sí debes contactar con Microsoft.
El juego se bloquea
Puede haber muchas cosas que nos den rabia o que nos cabreen, pero una de ellas es el momento cuando un juego se nos bloquea. Sin duda, es un momento bastante incómodo e intenso, por definirlo de una manera sencilla. Primero debemos presionar el botón Xbox One del mando. Luego vamos a menú y así, saldremos el juego. Finalmente, tendremos que reiniciar el juego para que todo vuelva a la normalidad.
Como hay juegos y bloqueos diferentes, en ocasiones no podemos hacer lo mencionado porque no nos permite salir del juego. Entonces, tendremos que apagar la consola directamente. ¿De qué manera?, pues apretando el botón Xbox durante unos 10 segundos. Así se apagará y la podrás volver a encender tras unos minutos más y volviendo a apretar este botón. Ahora se supone que está reiniciada y que ya tendría que ir el juego que nos tenía tan entretenidos.
Liberar espacio
Sabemos que cuando un dispositivo tiene ya poco espacio en su memoria, suele avisar de alguna manera. Así que con la Xbox One, no iba a ser menos. Pero es cierto que antes de que ocurra, ya nos gusta estar un poco atentos. No queremos que los problemas se vaya acumulando. Así que, si quieres liberar espacio y que tu consola funcione a la perfección puedes seguir los siguientes pasos. Para desinstalar debe ir a ‘Inicio’ y luego seleccionar ‘Juegos y Aplicaciones’.
Una vez ahí podrás hacer una especie de orden por uso. Gracias al menú podrás ir viendo los que realmente no usas y también, los que ocupan más o menos espacio. Así que, ordenarás por tamaño. Una vez seleccionado lo que quieres desinstalar, entonces pulsaremos ‘Menú’, ‘Administrar juego’ y ‘Desinstalar todo’. Cierto es que si eres de los que quieren todo guardado y te hace falta más espacio, nada como añadir almacenamiento externo.
Fuente: https://www.ocio.net
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